Te regalo mi cuerpo,
tomalo como el mas delicado regalo que alguien pudo dar.
Usalo de la manera que mas te guste, es tuyo,
descansa sobre el, huelelo, humedecelo, acaricialo, tratalo bien.
Pero cuidado porque mi cuerpo es fragil,
tan fragil como el alma que lleva dentro, tan sensible como el corazon que
lo mantiene vivo,
ese corazon que nunca te regale, y de un arrebato te lo robaste.
Ahora soy, enteramente tuya.